Los mejores postres, helados y productos de pastelería y panadería de San Rafael y una variada carta de salados y platos light.
La Delicia nació por allá en 1930 de la mano de nuestros abuelos Higinio Raffaeli y su señora Gisela, quienes trajeron de su Italia natal, las ansias de conocer y crecer. Así aprendieron el oficio de ser heladeros. Sus primeros productos fueron hielo en barra, helados en tabletas y praliné de maní. Las primeras elaboraciones las hacían en una tina de madera a pedal rodeada de hielo, y a su vez les transmitían la pasión a sus hijos, Higinio y Ana. Juntos, lograron ser los primeros en tener una flota de bicicletas con carritos, conducidos por impecables heladeros vestidos de blanco, quienes recorrían la ciudad vendiendo el fresco producto.
Durante los años 40, sorprendieron al público con la presentación de tres o cuatro sabores servidos en un cucurucho y detrás de un mostrador. Así, marcaron los primeros pasos en tener un local comercial, situación inédita para la época.
De esta manera, La Delicia de la calle Buenos Aires, fue la primera sucursal, y la responsable de instaurar la idea de salir en familia a disfrutar un helado… y, un lugar lleno de plantas que doña Gisela cuidaba con mucho amor.
Esta idea de servicio se fue afianzando durante los años 50 y 60 con más sabores, mayores conocimientos en el rubro y mejores instalaciones. Toda la familia La Delicia conocía el camino por donde querían transitar y diferenciarse: la calidad en todos sus productos.
Este espíritu, les permitió posicionarse como la mejor heladería de San Rafael.
Los años 70 se presentaron con experiencias muy difíciles de superar, como la pérdida de Don Higinio y más tarde la de sus dos hijos, debiendo afrontar, Gisela sola, con toda la responsabilidad de La Delicia. Empresa que ya se había transformado en un verdadero icono local.
Durante las décadas del 80 y 90, tres de sus nietos, Claudio, José y Gisela, se integraron al negocio aportando nuevas ideas, productos y servicios, siempre en el marco aprendido desde el principio: la calidad
A sus 84 años, y tranquila de haber brindado toda su energía, capacidad y liderazgo, fallece Doña Gisela, dejándole a sus nietos el compromiso de continuar con los valores y la misión institucional que los distinguía.
Las ansias de crecimiento generaron una nueva sucursal, en la calle San Martín, en pleno centro de San Rafael, y más tarde, La Delicia de la calle 3 de Febrero ofreciendo un espacio mucho más amplio y cómodo. Se sumó en esta etapa, equipamiento y nuevas maquinarias, juegos para niños, salón de te, con novedosa carta y amplia variedad de pastelería, incorporando el delivery de todos sus productos.
La Delicia seguía creciendo y esto demandó una clara organización y capacitación del personal involucrado.
Así, poco a poco, La Delicia inauguró el segundo milenio con la conformación de una PYME brindando trabajo a más de 70 personas, e instauró la idea de servicio calificado, un negocio con gran disponibilidad horaria, y una marca fuerte encargada de sorprender y satisfacer constantemente.
La Delicia del Boulevard fue un sueño durante mucho tiempo. Un sueño que desde el 2007 comenzó a concretarse, Gisela (nieta) sumó su experiencia operativa a los conocimientos constructivos de su esposo Nelson, y así juntos, con una fe enorme en poder alcanzar ese sueño, y con la vocación de continuar lo iniciado por sus abuelos, dieron el primer paso. Para ello, invitaron a mucha gente a formar parte de este compromiso, logrando conformar un excelente grupo de trabajo, para poder sumar y crecer.
Se preocuparon por transmitir el trabajo en equipo, la responsabilidad y el respeto, valores que se volcaron en el proyecto desde el principio, orientado tanto en la comodidad del cliente, la funcionalidad y el cumplimiento de premisas del desarrollo sustentable y cuidado del medio ambiente.
En este sentido se ha tenido especial atención en el cuidado de los recursos: agua, energía eléctrica y gas.
La Delicia vive desde los años 30 y siempre se pensó en brindar calidad, se pensó en innovar… hoy, la tercera generación continúa trabajando bajo esos valores afianzando la identidad de la marca.
La Delicia del Boulevard, un lugar pensando para poder disfrutar, diseño innovador y cómodo, decoración específicamente creada para cada lugar, arquitectura segura y de alta calidad que favorece el clima interno. Y para complementar ese ambiente, la Delicia del Boulevard creó una carta de productos dulces y salados de primer nivel.
La elaboración a la vista es la insignia que avala la calidad.
Panificación, repostería, gastronomía, chocolatería y heladería son las secciones que laten detrás de cada mostrador esperando ofrecer productos de excelencia.
Nos hemos esforzado por lograr un espacio confortable, cálido, con un salón para la familia que se completa con juegos infantiles.
Hemos capacitado a nuestro personal para que en La Delicia del Boulevard la atención calificada sea tan importante como el producto y sobre todas las cosas, para que cada empleado disfrute trabajar en este gran equipo.
Estamos dispuestos a compartir nuestra dedicación con ustedes, nos hemos preocupado por obtener lo mejor y generar en La Delicia del Boulevard, un buen lugar…
Bienvenidos y gracias por inspirarnos a seguir escribiendo esta historia.
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